Los cambios en tu vagina durante la menopausia, como la sequedad y la disminución de su grosor (atrofia vaginal) pueden causarte dolor durante la relación sexual, ¡un verdadero sufrimiento en algunas ocasiones¡
Si además tardas más en excitarte, estás cansanda por los sofocos nocturnos y tienes cambios de humor; es posible que tu vida sexual en la menopausia se altere de forma considerable.
Tú puedes mejorar tu salud sexual durante la menopausia:
- Ten relaciones sexuales más a menudo, mejora la lubricación de tu vagina y la mantiene más joven. Tómate tu tiempo en conseguir una mayor excitación, tendrás más humedad y menos dolor.
- Evita el uso de productos que irritan tu vagina y utiliza un lubricante vaginal cuando tengas relaciones sexuales. Utiliza productos hidratantes o con ácido hilalurónico de forma habitual (recurre a los hidratantes vaginales cuando los necesites). Si no es suficiente, tu médico puede aconsejarte tratamientos locales vaginales (cremas, comprimidos o anillos intravaginales) y otros tratamientos orales o novedosos como ospemifeno o prasterona. Pregunta a tu médico.
- Practica ejercicios para el suelo pélvico, aumentan el flujo sanguíneo hacia la vagina y fortalecen los músculos para el orgasmo.
- Si estás preocupada por estar menos interesada en el sexo, habla con tu médico acerca de tratamientos que incrementan tu libido.
- No olvides mantenerte activa, mejorarás tu energía, tu estado de ánimo y tu imagen corporal. Todos estos factores pueden ayudarte a aumentar tu interés por el sexo.
- Evita el tabaco, las drogas y el alcohol que pueden dificultarte tanto a nivel local, como tu respuesta en la actividad sexual.
- Y por supuesto, apuesta por sexo seguro, tu vagina está más fina y esto puede aumentar tus posibilidades de contraer algunas infecciones. Los preservativos son la mejor alternativa para prevenirlas.
¡Disfruta de una sexualidad saludable!!