Durante el embarazo, los pescados y mariscos son una excelente fuente de proteínas y ácidos grasos omega-3 que ayudan en el desarrollo de los ojos y del cerebro de tu bebé.
Pero recuerda que el mercurio esta presente en nuestros mares y ríos, y se puede concentrar en los pescados que comemos.
Cuanto más grandes y más tiempo vivan los peces, más mercurio acumulan en su grasa. Este pasa a la placenta y a la leche materna y puede alterar el sistema nervioso de tu hijo.
Por lo tanto, si estás buscando embarazo, estás embarazada o durante la lactancia:
- Evita el consumo de peces con alto contenido en mercurio como el pez espada/emperador, el atún rojo, tiburón (cazón, marrajo, pintarroja,tintorera) y el lucio.
- Consume 3-4 raciones de pescados a la semana, especialmente de bajo y medio contenido en mercurio, como abadejo, boquerón, bacalao, berberechos, almejas, chipirón, dorada, gambas, cangrejo, almejas, ostras, vieiras, salmón, bacalao…
¡No olvides disfrutar de una buena comida y haz una alimentación saludable!!