Es normal que durante el embarazo te encuentres más hinchada , especialmente en las piernas, tobillos y pies.
Mantener los pies elevados con un un cojín o subir las patas de la cama unos 5 cm puede ayudarte a mejorar este problema.
Sin embargo, cuando el edema o hinchazón aparece en la cara o las manos debes consultar, especialmente si eres hipertensa o si te han recomendado que te controles la tensión arterial.
El edema, junto con el incremento súbito de peso, puede ser un signo de alarma de la hipertensión relacionada con el embarazo o preeclampsia.
¡Puede ser útil comparar las fotos de antes del embarazo con la de ese momento!