La medición de la tensión arterial es fundamental en el embarazo. No es lo mismo que se eleve en la primera mitad del embarazo que a partir de las 20 semanas.
– Antes de la 20 semanas:
Si tu tensión arterial sube >140/90 o se eleva de la que tienes normalmente más de 30 mm Hg debes consultar a tu médico. Es posible que haya una factor previo de HTA y si se mantiene, puede ser necesario poner un tratamiento para ello.
– Después de las 20 semanas:
Si tu tensión arterial sube >140/90 o se eleva de la que tienes normalmente más de 30 mm Hg , haz tres tomas seguidas después de 10 minutos sentada y tranquila. Si persiste esta cifra o se asocia a dolor de cabeza, visión de luces o «moscas» o edemas en manos y cara, debes acudir a urgencias. Habría que descartar que no haya una preeclampsia (hipertensión relacionada con el embarazo) que puede representar un riesgo para ti y para tu bebé.