En este artículo quiero darte algunas recomendaciones para disminuir algunas sustancias químicas y metales que pueden que ocasionar un problema si se acumulan en tu organismo.

La clave es que los reconozcas para poder disminuir su exposición.

¿Dónde los encontramos?

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Estas sustancias pueden estar en el ambiente o en productos con los que tienes contacto en tu vida diaria. Llegan a través del aire, de tu dieta, de los productos que tienes o utilizas en tu hogar, de los cosméticos y productos de uso personal. 

Desde hace casi 20 años se conoce la relación de algunos de ellos con nuestra salud..

Pesticidas.  Se usan para evitar o tratar plagas por lo que debes tener especial atención a tu cesta de la compra. Muchos tóxicos se acumulan especialmente en las grasas. También están presentes en los productos de jardinería.

Mercurio. Es un metal pesado presente en muchas especies marinas, sobre todo las de gran tamaño. Otra fuente de mercurio son las amalgamas dentales.

Bisfenol A. La lista de productos que lo contienen es muy larga: empastes dentales, plásticos policarbonatos, resinas, mordedores, juguetes, platos y vasos de plástico, latas de conserva, papel térmico de los tickets de la compra…, y lo identificarás con el número siete dentro del triángulo de reciclaje o con las siglas BPA free.

Parabenos. Se usan como conservantes de los productos de cosmética e higiene personal.

Ftalatos. Se encuentran en productos de plástico como botellas y envases alimenticios, juguetes, pinturas, ropa, PVC o cosméticos.

Alquilfenoles y organoclorados. Están presentes en los productos de limpieza del hogar o en la ropa.

Teflón. En sartenes, moldes y baterías antiadherentes y entran en tu organismo cuando cocinas los alimentos, especialmente si están rallados. También los encuentras en productos para el cabello, papeles para envolver alimentos, productos para la limpieza de alfombras, espumas anti-incendios, abrillantadores de suelos, lubricantes, y en elementos como tejidos (del tipo del Goretex), tapicerías, alfombras, o pinturas (por su propiedades hidrófugas y anti-manchas), pesticidas, tensioactivos y emulsionantes en la industria…

Otras sustancias presentes en la contaminación atmosférica con el ozono y el dióxido de nitrógeno y las partículas finas, pueden también suponer un riesgo para nuestra salud y debemos tenerlas en cuenta en los momentos de más nivel de contaminación.

Hábitos como el tabaco, alcohol, y otras drogas merecen una mención aparte y le dedicaré un artículo en próximas semanas.

¿Cómo influyen estas sustancias en tu embarazo?

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Debes saber que es difícil establecer una relación directa de cada una de estas sustancias con las complicaciones del embarazo. El riesgo depende no sólo de la cantidad de sustancia acumulada y de la combinación de las mismas,  sino del momento del embarazo, de tu predisposición genética y del efecto barrera que ejerce tu placenta.

¿Cuáles son sus riesgos durante el embarazo?

El acúmulo de estas sustancias se ha relacionado con algunas complicaciones del embarazo, aunque debes estar tranquila porque no se ha  demostrado su relación directa con ellas.

Las más estudiadas son las relacionadas con algunas malformaciones  genitourinaria, con el  riesgo de tener un niño con bajo peso al nacer o de tener un parto prematuro.

En los últimos estudios de la salud en la infancia y medio ambiente (proyecto INMA) , han concluido que la exposición al bisfenol A durante el embarazo puede aumentar el riesgo de obesidad y de infecciones respiratorias a lo largo de la infancia.

 ¿Qué puedes hacer?

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Mi recomendación es que disminuyas tu exposición en la medida que puedas pero sin agobiarte.

Primero identificándolas en las etiquetas. Empieza poco a poco, sin  darte cuenta, habrás creado un entorno más saludable, tanto para el desarrollo de tu hijo como para ti.

–Antes del embarazo debes ir preparándote. Es importante planificarlo porque algunos órganos se están formado antes de descubrir que estás embarazada.

–Durante el embarazo, ocurren una serie de cambios que facilitan que  los tóxicos se eliminen peor y es un momento más vulnerable para ti y para tu hijo.

Puedes empezar por cambiar los hábitos más frecuentes en …

Tu dieta 
Tu hogar
 Tus cosméticos y productos de uso personal

Tu dieta:

Los alimentos pueden estar contaminados y son la fuente principal de entrada de sustancias tóxicas, además se ingieren varias veces al día, por lo que la exposición es habitual y continuada en el tiempo.

En lo que comes  hay …

1. Pesticidas: La mejor manera de evitarlos es apostar por alimentos de cultivo ecológico, alimentos frescos y de temporada, poco procesados y tener cuidado con los excesos de carne y grasas animales.
2. Mercurio.Se recomiende reducir el consumo de algunos peces como el atún, el pez espada…, especialmente en el embarazo, porque puede afectar al desarrollo del sistema nervioso de tu hijo. Se recomienda:

• 2 porciones a la semana de pescados ”grasos”, ricos en omega 3: Salmón, arenques, sardinas, caballa.
• Evitar peces depredadores (pez espada, tiburón) en embarazo.
• Recomendable: variar especies de pescado y sus orígenes para evitar exposición al mismo tóxico.

Cómo conservas y envases los alimentos……

Tus alimentos y bebidas pueden contener Bisfenol A. Utiliza botes de cristal mejor que de aluminio, evita bebidas en lata, NO calientes alimentos en su embalaje plástico. Están prohibidos desde 2015 en botellas, latas, plásticos ali

mentarios. Revisa este indicador en las botellas

¿Con qué cocinas? …….

Seguros: acero inoxidable, aluminio fundido anodizado, hierro (lávalo a mano, seca rápidamente y cúbrelo con una capa de aceite) o hierro colado, barro, vídrio/ vitrocerámico y silicona platino.

Evita el teflón que tienen perfluorados o asegúrate de que esté en buen estado (son los que evitan que las tortillas se nos peguen a la sartén) y la silicona  si contactan con alimentos ácidos.

RECUERDA:

1.Consume alimentos frescos o poco procesados en lugar de ultraprocesados.

Come mucha fruta y verdura. Provee de antioxidantes que pueden ayudar a contrarrestar algunos efectos de los tóxicos, y son más nutritivos. Lávala bien, mejor con jabón porque los pesticidas son liposolubles. Otra opción es que recurras a la ecológica (alimentos BIO, productos frescos, locales y de temporada). 

2.Reduce el uso de alimentos y bebidas enlatados y en envases de plástico.

3.Usa recipientes de hierro colado, acero inoxidable, con revestimiento cerámico, vidrio o vitrocerámico. Compra material de cocina que están libres de PFOS y PFOAS.

Tu casa:

1.Limpieza: Reduce y/o evita el uso de ciertos productos de limpieza, especialmente de los más fuertes. Recurre a ecológicos o productos naturales como el vinagre, el bicarbonato o el limón.

2.No uses pesticidas sintéticos domésticos en la casa o el jardín

3.Ten cuidado con las reformas de tu casa. Escoge pinturas de base mineral o vegetal.  Minimiza la compra de productos recién fabricados: muebles, telas, sartenes antiadherentes y automóviles durante el embarazo y la lactancia.

4.Elimina el polvo al menos una vez a la semana, con trapo mojado o aspirador.

5.Ventila tu casa, al menos dos veces al día (puedes instalar purificadores de aire para químicos).

6.Evita los ambientadores sintéticos.

7.Elige juguetes libres de plastificantes como los ftalatos.

Los cosméticos y productos de higiene personal, como se usan a diario, son otra fuente habitual de exposición a estas sustancias químicas.

1.Minimiza el uso de productos de cuidado personal: cremas hidratantes, cosméticos, geles de baño y fragancias. Mira la composición de tus productos y sustituye los que contengan sustancias como ftalatos, parabenos, aluminio o triclosán por otros. Si además son de certificado ecológico, mejor.

2.Consulta con tu odontólogo, porque tienes la posibilidad de material que no incluyan ni mercurio ni bisfenol A en su formulación.

3.Es importante lavar los tejidos nuevos (sábanas, toallas, ropa…) antes de usarlos, preferentemente con jabones o detergentes ecológicos. Dejar remojar la ropa en agua con bicarbonato o buscar prendas de procedencia ecológica. ropa sin plastificantes. Buscar un suavizante para la ropa menos nocivo que los químicos..

Si quieres ampliar la información te sugiero estas páginas: Hogar sin tóxicos , Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos,  , FDA food and drugs, Agencia Española de Consumo y Seguridad Alimentaria, Ministerio de Sanidad y Consumo, Unidad clínica de Salud ambiental Infantil, Agencia europea de Seguridad Alimentaria

Si tienes alguna duda o quieres que te expliquemos más detalladamente alguna cuestión, contacta con nosotras (consultas).