Es cierto que disminuir el consumo de café, hacer ejercicio y evitar el sobrepeso pueden ayudarte a controlar los síntomas de la menopausia; pero también es cierto que muchas veces no es suficiente.
Lo peor de todo es que, a pesar de la cantidad de tratamientos disponibles, son pocas las mujeres que los toman.
El miedo a las hormonas está tan extendido que somos capaces de aguantar los sofocos por el miedo a los efectos secundarios.
Un ejemplo muy gráfico es el hecho de que el sobrepeso influye más en el desarrollo de un cáncer de mama que tomar hormonas.
Así que por favor, si tienes sofocos, insomnio o irritabilidad pide cita hoy mismo con tu ginecólogo. Deja de sufrir ¡Te podemos ayudar!