Los fibroadenomas son nódulos benignos de la mama.
Lo habitual es que no sea necesario operarlos y con un seguimiento (habitualmente durante 2 años) que compruebe la estabilidad de la lesión es suficiente.
Pero hay varios motivos por los que recomendamos operarlos, como porque aumenten de tamaño, te molesten o incluso por el hecho de que te preocupe tenerlo.
Otro motivo para extirpar estos nódulos es si presentan características ecográficas sospechosas, que nos obliguen a descartar que se trate de una lesión maligna.