Muchas de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes cursan sin que tú tengas ningún síntoma.
Infecciones como el gonococo o la clamidia pueden cursar de forma asintomática y si no se tratan, pueden ascender a útero y/o trompas provocando lo que llamamos una enfermedad inflamatoria pélvica.
La mayoría de las infecciones de transmisión sexual se curan con el tratamiento adecuado.
Por tanto, si tienes relaciones sexuales con una persona que tenga una infección, pide una valoración por tu médico, ya que simplemente con una muestra de orina o de tu flujo vaginal se puede diagnosticar o descartar cualquiera de estas infecciones.