Un aborto diferido es cuando se interrumpe una gestación de forma espontánea, pero no se expulsan los restos. En estos casos es necesario que te ayudemos a vaciar la cavidad uterina. Para eso tenemos 2 opciones: un tratamiento médico que hará que lo expulses o la realización de un legrado.

Como muchas nos preguntáis qué es mejor, vamos a repasar en qué consiste cada una, y las ventajas y desventajas de cada una de ellas.

El tratamiento médico consiste en la administración vaginal de unas pastillas (prostaglandinas), a veces acompañado de un tratamiento oral (mifepristona), que provocará contracciones uterinas y unas modificaciones a nivel del cérvix uterino, que permitirán que expulses el contenido del útero.

La ventaja de este método es que si funciona evitas tener que hacerte un legrado, con los riesgos y posibles complicaciones de la técnica.

Y ¿Qué desventajas tiene? En general es un tratamiento que tiene pocas complicaciones y es eficaz en aproximadamente el 85% de los casos, pero si no funciona, después de esperar el plazo que te recomienden (habitualmente una semana), tendremos que hacerte un legrado.

Además del posible fracaso, debes saber que es frecuente un sangrado abundante (ligeramente mayor que una regla) y un dolor moderado, pero no te preocupes porque siempre os recomendamos un tratamiento para controlar ese dolor.

Aunque poco frecuentes con las dosis que utilizamos, siempre os explicamos que está descrita la rotura uterina como una posible complicación, pero la verdad es que en todos los años que llevo trabajando nunca lo he visto.

La otra opción es hacerte un legrado, que consiste básicamente en introducir una legra (es parecido a una cuchara larga) en el útero a través de la vagina,  y extraer los restos que haya dentro.

El legrado se realiza con anestesia general y en quirófano, habitualmente de forma ambulatoria, por lo que te irías en el día a casa.

En general el legrado es una cirugía con muy pocas complicaciones, aunque como todas las cirugías puede haber complicaciones con la anestesia, infecciones, sangrados o perforaciones uterinas.

Estas complicaciones habitualmente se resuelven con tratamiento médico (medicamentos, sueros, etc.) pero pueden llegar a requerir una reintervención, en algunos casos de urgencia.

La ventaja del legrado es que se resuelve el problema en 1 día, sin tener que esperar a que haga efecto la medicación, como ocurre con el tratamiento médico.

Generalmente os explicamos las 2 opciones y una vez informadas podrás elegir qué prefieres.  Sin embargo, tienes que saber que hay ocasiones en las que en tu caso concreto, desde el punto de vista médico alguna de las 2 opciones está contraindicada, pero tranquila porque siempre te vamos a explicar y orientar qué es lo mejor para ti.