Te acaban de diagnosticar un cáncer de mama y se te viene el mundo encima. Surgen  emociones como incredulidad, miedo, inseguridad, preocupación por ti y tus familiares, tristeza y, en ocasiones, también depresión. 

Tranquila, es normal, nadie está preparado para escuchar el diagnostico de que tiene un tumor maligno de mama. Es más, a veces es necesario pedir un poco de ayuda psicológica.

Si es así, no lo dudes, pídela. Puedes contactar con un psicólogo o asociaciones, como la AECC  Hay muchas mujeres que pasan por esto y muchas veces, sólo hablar con otra mujer que haya pasado por lo mismo que tú, te puede resultar muy útil.

Pero antes de seguir párate a pensar, ¿a cuántas mujeres conoces con este diagnóstico? A muchas ¿verdad? Pues ahora piensa en cómo están, seguro que la mayoría hace su vida normal, a que sí.

Pues te diría aún más, la mayoría están curadas, sí, lo que oyes, el cáncer de mama se cura. La palabra cáncer suena fatal, pero lo que sí es cierto es que no todos los tumores  son iguales y dado que el de mama, desgraciadamente es tan frecuente, hace que tengamos mucha experiencia y armas para tratarle.

Seguro que no te imaginas que 1 de cada 8 mujeres va a tener cáncer de mama a lo largo de su vida. Pero es que éste es el 2º tumor más frecuente en las mujeres y el primero en las mujeres Occidentales.

Hoy en consulta he decidido escribir este artículo porque creo que podría ser útil si te cuento lo mismo que en la consulta, para que lo puedas leer tranquilamente en tu casa.

Y es que me he dado cuenta de que el primer día que venís a la consulta y os decimos el diagnóstico, os contamos un montón de cosas, pero desde el momento en que oís la palabra tumor, cáncer o neoplasia ya no podéis concentraros en nada más de lo que os estamos contando.

Así que tranquila, vamos a repasar qué es lo que te explicamos en consulta cuando te hemos detectado un tumor de mama.

Lo primero que te vamos a explicar es que hemos realizado una biopsia ante una lesión sospechosa, ya sea de algo de que te palpaste, o que hayamos visto en alguna eco o mamografía.

En este momento es cuando ya te vamos a explicar que el resultado no es benigno, es decir, que tienes un tumor maligno de mama y por si a partir de este momento no nos escuchas, te voy a repetir que actualmente la mayoría de los cánceres de mama se curan, sí lo has oído bien, se curan.

Te explicaremos también qué tipo de neoplasia es, los 2 diagnósticos más frecuentes son:

• El carcinoma in situ, que es en el que las células malignas crecen dentro del conducto mamario sin invadir ni  afectar el tejido que está alrededor.
• El carcinoma infiltrante, que ha atravesado el conducto mamario y ha infiltrado el tejido mamario que le rodea.

Otra de las cosas de las que te vamos a hablar es de los factores pronósticos que tiene el tumor, ya que el cáncer de mama incluye un grupo muy distintos de tumores.

Esto de los factores pronósticos o marcadores inmunohistoquímicos (IHQ)  a lo mejor te suena a chino, pero esta información tiene mucha importancia, al permitirnos identificar aquellos tumores que van a ser más agresivos y elegir el tratamiento más adecuado en tu caso. 

Estos factores pronósticos se van a analizar en el tejido que hemos obtenido con la biopsia de la mama y normalmente no es necesario obtener más muestras. 

Los marcadores IHQ mas frecuéntemente empleados son:

• Receptores hormonales. Determina la presencia o no a receptores de estrógenos (RE) y de progesterona (RP). Su presencia se asocia, en la mayoría de los estudios, con un mejor pronóstico. Además nos permite identificar los tumores que van a responder a tratamientos con hormonas.
• Presencia de Her-2. Aunque en general se considera un factor de mal pronóstico, actualmente disponemos de un tratamiento muy eficaz frente a estos tumores, el Trastuzumab.
• Antígeno Ki-67. Se expresa en porcentaje y nos permite medir el grado de proliferación celular, es decir, las células que están creciendo. En general un valor mayor de 14%, se considera de peor pronóstico.

A partir del momento en que tenemos el resultado de la biopsia,  comienza un camino muy importante,  que consiste en conseguir toda la información que sea posible, para poder diseñar un tratamiento lo más personalizado posible en tu caso concreto.

¿Y por qué te cuento esto? Pues porque cuando recibís un diagnóstico como éste, lo primero que nos decís es: ¡Por favor quítamelo, opérame cuanto antes! Lo entiendo y es normal esta reacción. Pero te digo una cosa, es un error. No todos los tumores se benefician de una cirugía de entrada.

En algunos tumores, es preferible iniciar un tratamiento médico, ya sea con hormonas o quimioterapia y después operar. En estos casos, además de conseguir reducir el tumor, nos permite ver la respuesta al tratamiento y podríamos cambiar la estrategia si no responde.

Bueno, pues una vez que hemos dejado claro que no hay que precipitarse, que necesitamos estudiar el tumor, te explico cuáles van a ser los siguientes pasos.

Normalmente en esta consulta te vamos a explorar y a hacer una revisión ginecológica, junto con una historia clínica detallada, donde revisaremos si tienes algún familiar con algún cáncer o algún otro factor de riesgo.

A partir de ahora te solicitaremos un estudio de los ganglios de la axila, que suele ser con una ecografía. En muchas ocasiones se ampliará el estudio de la mama con una resonancia magnética y en función de los hallazgos, a veces hay que realizar más biopsias u otras proyecciones con mamografía o ecografía.

Cuando ya tengamos toda la información, te explicaremos qué tratamiento es el más recomendable, ya sea iniciar un tratamiento médico y después operarte o directamente operarte y en función del resultado definitivo, administrarte un tratamiento médico  y/o radioterápico después.

Respecto al tipo de cirugía, cuidados después de la misma, consejos previos y tratamientos complementarios hablaremos en otro artículo, pero si tienes alguna duda al respecto, o quieres comentar algo de tu caso concreto, no dudes en contactar con nosotras a través de este enlace: (enlace a consultas)