¿Sabías que hasta el 70 % de las mujeres mayores de 40 años tienen miomas? Seguro que si tú no tienes uno, o incluso varios, sí que hay alguien cercano a ti que los tenga. Así que sigue leyendo, porque te voy a explicar todo lo relativo a los miomas.
A lo mejor te suena más fibromioma o leiomioma, pero todos estos términos se refieren a lo mismo, es decir, tumores benignos que se originan en el músculo liso del útero.
El útero ya sabes que es un órgano que básicamente se puede dividir en 3 capas:
- La serosa. Es una capa fina y la parte más externa que cubre la pared del útero.
- El miometrio. La capa media, compuesta fundamentalmente por músculo.
- El endometrio. La más interna, que sangra y se descama mensualmente con las reglas.
Bueno pues los miomas, son tumores que se desarrollan en el miometrio y que según su relación con el resto de las capas uterinas, se denominan:
Subserosos. Los más externos, cerca de la serosa
Intramurales. Los que están fundamentalmente en la pared uterina.
Submucosos. Los más internos, es decir, los que están cerca del endometrio.
¿Y por qué te cuento todo esto? Pues porque tanto los síntomas, tratamiento y relación de los miomas con el embarazo, van a depender fundamentalmente de su localización.
¿Qué síntomas producen los miomas?
La mayoría de los miomas no producen ninguna sintomatología, pero la tercera parte de las mujeres con fibromas consultan por sangrados (lo más frecuente), dolor abdominal, palpación de una masa a nivel de la pelvis (cuando son muy grandes), o incluso síntomas urinarios o digestivos, por compresión de la vejiga o el intestino.
Pero como ya te he dicho, lo más frecuente es que los miomas se diagnostiquen como un hallazgo casual, en una revisión rutinaria y que no produzca ninguna sintomatología.
¿Los miomas pueden producir abortos o esterilidad?
Esta es la pregunta del millón. Muchas mujeres me preguntan en la consulta si el mioma puede ser causa de esterilidad o de aborto. La respuesta es que depende y que, en muchas ocasiones, después de realizar las pruebas para un estudio de esterilidad o de abortos de repetición, no está claro si el hallazgo de un mioma es o no la causa.
En el caso de los miomas submucosos, (que como ya te he dicho son los más internos, los que están cerca del endometrio), o los miomas intramurales que deformen la cavidad endometrial, que es donde se debe implantar el saco gestacional, sí parece que puedan dificultar la concepción y aumentar el número de abortos.
Sin embargo, los miomas subserosos (alejados del endometrio) o los intramurales que no deforman la cavidad, no parece que tengan relación con el aborto o la esterilidad. En algunos casos de miomas grandes, sí podrían producir un problema en la cantidad de sangre que llega al endometrio y ser la causa, pero en estos casos no está tan claro el papel de los miomas.
¿Si me quedo embarazada con un mioma puedo tener problemas?
Los miomas son tumores que crecen con el estímulo hormonal, de forma que en el embarazo, habitualmente tienen un crecimiento importante y después del parto suelen volver al tamaño inicial.
En función del tamaño y localización sí pueden alterar y producir problemas durante el embarazo e incluso en el momento del parto.
Respecto al embarazo, los miomas grandes pueden alterar la forma del útero y producir problemas de espacio, que pueden ser causa de parto prematuro e incluso dificultar el crecimiento del bebé y provocar un retraso del crecimiento uterino o CIR.
En cuanto al parto, los miomas que están localizados en la parte más cercana al cuello uterino, pueden dificultar que descienda la cabeza y el bebé se coloque adecuadamente para un parto vaginal y sea necesario practicarte una cesárea.
Pero tampoco te debes alarmar, esto suele ser lo menos frecuente, porque lo habitual es que aunque crezcan durante el embarazo, los miomas no suelen impedir que tu bebé nazca sano y fuerte.
¿Cómo se diagnostica un mioma?
El método más sencillo y sensible para el diagnóstico de los miomas es la ecografía, tanto vaginal como abdominal para los que son más grandes.
La eco nos va a permitir ver cuántos miomas hay, dónde están y sobre todo su relación con el endometrio, muy importante sobre todo en caso de mujeres que estén buscando embarazo o tengan sangrados abundantes.
Además al ser una técnica tan accesible, ya que habitualmente en las consultas de ginecología hay un ecógrafo, nos permite hacer un seguimiento del tamaño y evolución de los mismos.
En los miomas submucosos (los más internos), es muy útil la histeroscopia, ya que nos permite ver el mioma e incluso en algunos casos extirparlos por esta vía sin necesidad de abrir la tripa.
La histeroscopia ya sabes que es una prueba que se hace de forma ambulatoria, habitualmente en consulta. Se introduce una cámara desde la vagina, a través del cuello uterino y esto nos permite ver el útero por dentro. En los casos en los que la mayor parte del mioma asoma en cavidad, se puede introducir un instrumento que nos permite extirpar el mioma.
En algunos casos en los que hay dudas diagnósticas con la ecografía, la resonancia magnética (RM) es la mejor técnica para complementar a la eco, en el diagnóstico de los miomas.
¿Cuál es el mejor tratamiento de los miomas?
No hay un ¨mejor tratamiento¨ para todos los miomas, ya que va a depender de muchas cosas, como el tamaño, crecimiento de los mismos, relación con el endometrio, síntomas que produzca, deseo gestacional etc
En general un mioma no muy grande, que no produzca síntomas y permanezca estable, se puede plantear una actitud expectante, es decir, simplemente vigilarlo.
En los casos de miomas que van creciendo de forma progresiva, sobre todo en mujeres que ya no tienen reglas, la recomendación más habitual es la cirugía, ya que hay una variedad de miomas malignos muy infrecuentes, los sarcomas, que no se pueden diferenciar con pruebas de imagen de los miomas benignos. La única forma de diferenciarlos es cuando se extirpan y se estudian en anatomía patológica.
En los miomas que producen síntomas, hay múltiples opciones de tratamiento farmacológico, tanto hormonales como no hormonales, que habitualmente suelen controlar los síntomas.
No te puedo explicar aquí todas las opciones porque sería muy largo, pero sí quería hablarte de uno en concreto, el acetato de ulipristal, un fármaco relativamente nuevo, que controla muy eficazmente los sangrados, pero que precisa un control estricto de la función hepática.
Otras opciones terapéuticas son la embolización uterina, el tratamiento mediante ultrasonido guíado por Resonancia Magnética (MRgFUS) o incluso la miolísis con láser.
Como ves hay multitud de opciones, y es preciso ver la situación concreta de cada mujer para decidir cuál es el tratamiento más adecuado. Pero en general los miomas son tumores benignos con los que convivirás sin problema desde que te lo diagnostiquen.
No sé si con este artículo te he resuelto todas las dudas, espero que sí, pero si tienes alguna duda de tu caso en concreto, no dudes en contactar con nosotras (Enlace a consulta)
Dra. Carmen Sabadell
